El ahorro y la eficiencia energética son dos requisitos indispensables en las instalaciones de agua actuales. Conseguirlos pasa por disponer de recursos técnicos específicos.
Tecnologías sostenibles para instalaciones de agua
El sistema de agua caliente es la segunda instalación de un hogar que consume más energía, solamente por detrás de la calefacción. Por lo tanto, es importante aplicar métodos de ahorro de energía y uso eficiente del agua que ayuden a su optimización.
La elección de un sistema de acumulación es básica para el ahorro y la eficiencia energética de una instalación ACS en instalaciones que requieren grandes caudales. En él, se almacena el agua hasta su uso. Para lograr su optimización, es necesario adecuar tanto la generación como la acumulación de ACS a la demanda.
Asimismo, si cuidamos algunos aspectos del diseño y el uso de la energía podremos mejorar la eficiencia de la instalación. Por ejemplo, los sistemas centralizados en los edificios de viviendas favorecen un gran ahorro en el abastecimiento de ACS.
Recirculación y aislamientos para el ahorro y la eficiencia energética
Uno de los métodos básicos para el ahorro de energía y especialmente agua en una instalación de agua caliente sanitaria es la recirculación del agua. Es especialmente indicada cuando los puntos de consumo están muy alejados del acumulador, es muy importante que su caudal se adapte al máximo al uso que se va a dar al agua caliente sanitaria, pudiendo instalar un programador horario que interrumpa el funcionamiento de la bomba por la noche cuando no es previsible el uso de agua caliente. Es fundamental aislar bien el circuito de recirculación para no perder energía (ver línea de puntos del esquema).
De hecho, la red de retorno debe existir siempre cuando desde el acumulador al punto de consumo más lejano haya 15 metros o más. Además, la pérdida máxima de temperatura debe ser de 3ºC. Igualmente, el diámetro interior mínimo para una correcta tubería de retorno es de 16 mm.
Asimismo, el aislamiento es un requisito indispensable para tener un uso eficiente del agua con el mínimo gasto energético posible. Esto implica la instalación de la acumulación de calor en cuartos bien aislados y el uso de los espesores mínimos de aislamiento térmico establecidos en el Reglamento de Instalaciones Térmicas en los Edificios para las tuberías y además los fabricantes suministran aislamientos extra los acumuladores, lo que redunda en reducción de pérdida de calor menor consumo y ahorro energético.
Por otro lado, es necesario que la temperatura de preparación de la ACS sea lo más ajustada posible, para reducir las pérdidas de calor en las tuberías y acumuladores.
Las energías renovables, indispensables
Al plantearnos el ahorro y la eficiencia energética de un sistema ACS, no podemos olvidar la instalación de bombas de calor y, sobre todo, el empleo de energías renovables para su abastecimiento.
Los equipos de energía solar con acumuladores solares son indispensables para reducir el gasto de energía.
Instalaciones centralizadas en edificios
Si buscamos un uso eficiente del ACS en un edificio de viviendas, optaremos por un sistema de energía solar con caldera central y montantes de agua caliente sanitaria. Además, cada una de las viviendas tendrá un contador de la energía .
La temperatura de distribución se programará teniendo en cuenta el estado de las tuberías existentes, y se colocarán a la salida válvula de regulación termostáticas o con servomotores para regularla.
Los datos del RITE
En el ahorro y la eficiencia energética de una instalación ACS no podemos olvidar los requisitos establecidos por el Reglamento de Instalaciones Térmicas en los Edificios para estos sistemas.
Se aplica en todos los edificios de nueva construcción y en los rehabilitados en la actualidad. Dicta los requisitos de aislamiento térmico de tuberías, equipos, accesorios y conductos para limitar las pérdidas globales de energía a un máximo del 4%.
Establece un procedimiento simplificado para calcular el espesor del aislamiento térmico de las instalaciones con potencia térmica nominal menor o igual a 70 kW, que variará según el diámetro de la tubería, la temperatura del fluido y si el conducto va por el interior o el exterior del edificio.
Finalmente, el procedimiento alternativo para el aislamiento de equipos con potencias superiores a 70 kW debe documentar el espesor elegido en función de las características citadas anteriormente
El ahorro y la eficiencia energética conseguidos con la aplicación de estos sistemas son indispensables para contar con instalaciones sostenibles.
